Pues es que tiene una cualidad injusta, excluyente y antidemocrática. Ya que se lleva por delante pilares fundamentales de la democracia como la libertad educativa o el derecho a la presunción de inocencia.
Con la excusa de evitar la discriminación del colectivo LGTBI extingue y recorta derechos y libertades adquiridos en la Constitución. Al mismo tiempo impondrá obligatoriamente en los colegios estas prácticas para que los niños aprendan a ser homosexuales.
Bajo el pretexto de una supuesta protección a la diversidad sexual o a la ideología de género, lo que se pretende es imponer el pensamiento único: que todos piensen y se expresen de la misma forma; y para los rebeldes, multas. No hay espacio para los que piensen diferente.
Lo más vergonzoso de esta ley es que penaliza y prohíbe que una persona quiera ser heterosexual.
La ley preve multas de hasta 45.000 euros a quien pretenda cambiar su orientación sexual hacia la heterosexualidad.
La ley ignora el derecho de los padres de elegir la educación de sus hijos.
La ley obligará a todos los colegios de Madrid , tanto públicos como privados, a que el colectivo gay pueda adoctrinar a los niños desde infantil (infantes-kinder).
Para ello, la administración madrileña pagará con dinero público las clases y talleres que deberán impartir los monitores de la LGTBI (Lesbianas, Gais, Trans, Bisexuales e intersexuales).
Artículo extraído de: NoticiasFinales
Fuente original: Actuall
Sabes una cosa? que en todo hacen lo que quieren y les da la real gana.
ResponderEliminarUn beso
Desde luego. Un beso.
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